Descubre los tipos de contratos laborales en España y aprende a diferenciarlos
Actualmente, en España, existen infinidad de tipos de contratos laborales. Pero todos ellos los podemos agrupar en cuatro categorías bien diferenciadas entre sí. Estos cuatro tipos son:
- Contratos indefinidos.
- Contratos temporales.
- Contratos para la formación y el aprendizaje.
- Contratos en prácticas.
Contrato indefinido.
El contrato indefinido es aquel que se estipula sin establecer límites de tiempo, en cuanto a la duración del contrato se refiere.
Este tipo de contrato puede ser tanto verbal como escrito y podrá ejecutarse a jornada completa, parcial o para la prestación de servicios discontinuos.
A su vez, esta modalidad de contratos tiene una peculiaridad y es que en algunos casos pueden ser beneficiarios de incentivos a la contratación, siempre y cuando se cumplan los requisitos que exija la normativa de aplicación.
Contrato temporal.
El contrato temporal, a diferencia del indefinido, establece una relación entre empresario y trabajador por un tiempo determinado.
Este tipo de contratos se ejecutan a jornada completa o parcial. Y pueden formalizarse por escrito, y de forma verbal siempre y cuando la duración del mismo sea inferior a cuatro semanas y sea a jornada completa.
Como curiosidad, cabe destacar que aquellos trabajadores que en un periodo de treinta meses (dos años y medio) hayan sido contratados durante más de 24 meses por la misma empresa o grupo de empresa, mediante dos o más contratos temporales, automáticamente adquirirán la condición de trabajadores fijos (a excepción de relaciones laborales de interinidad y relevo).
Contrato para la formación y el aprendizaje.
Esta tipología de contrato se efectúa con el fin de favorecer la inserción laboral y la formación de personas jóvenes.
Normalmente, las personas que tienen este tipo de contrato alternan sus horas de trabajo con horas de formación adicional. Esta formación será necesaria para la obtención del título de formación profesional.
Las empresas que realicen este tipo de contratos pueden ser beneficiarias de incentivos a la contratación. Estos incentivos dependerán del tamaño de la plantilla.
Una vez que se agote la duración máxima del contrato para la formación, si el trabajador pasa a ser indefinido, las empresas tendrán derecho a una reducción de 1.500€ (o 1.800€ en el caso de que la trabajadora sea mujer) en las cuotas de la Seguridad Social.
Contratos en prácticas.
Por último, el contrato en prácticas está diseñado para que las personas que acaban de realizar sus estudios obtengan unas prácticas profesionales adecuadas. Este contrato podrá realizarse siempre y cuando las personas a contratar estén en posesión de un título universitario, de formación profesional (ya sea de grado medio o superior) o títulos oficialmente reconocidos como equivalentes a los anteriormente citados.
Estos contratos también pueden ser beneficiarios de incentivos a la contratación. En el caso de que este contrato se realice a una persona menor de 35 años con una discapacidad igual o superior al 33%, la empresa contratante tendrá derecho a una reducción del 50% en las cuotas de la Seguridad Social durante la vigencia del contrato.
Ahora que ya conoces las características principales de cada contrato podrás identificarlos más fácilmente, aunque esto solo son pequeñas pinceladas. Cada contrato alberga muchas otras cláusulas y condiciones que habría que analizar detenidamente.
Si eres trabajador o empresario y tienes dudas al respecto, llámanos al 951 770 562. Estaremos encantados de atenderte.
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